Internacionales

Elecciones seccionales en Ecuador: El regreso del correísmo y el rechazo a un Estado ausente


Por Juan Fran­cis­co Ca­mino*

Las elec­cio­nes de au­to­ri­da­des de go­bier­nos lo­ca­les (al­cal­des, con­ce­ja­les, vo­ca­les, en­tre otros), de con­se­je­ros del Con­se­jo de Par­ti­ci­pa­ción Ciu­da­da­na y Con­trol So­cial, y el re­fe­rén­dum pro­pues­to por el go­bierno ecua­to­riano, rea­li­za­das el 5 de fe­bre­ro de 2023, no solo re­pre­sen­tan una de­rro­ta du­rí­si­ma para la ad­mi­nis­tra­ción del pre­si­den­te Gui­ller­mo Las­so y para la cen­tro de­re­cha, ten­den­cia a la que éste per­te­ne­ce. Tam­bién han dado un men­sa­je cla­rí­si­mo a toda la cla­se po­lí­ti­ca del Ecua­dor so­bre lo que la ciu­da­da­nía es­pe­ra del Es­ta­do.

Si bien el re­sul­ta­do elec­to­ral debe ana­li­zar­se se­gún las par­ti­cu­la­ri­da­des que tie­ne cada pro­vin­cia y ciu­dad del Ecua­dor, es evi­den­te que el úni­co ga­na­dor de la jor­na­da es el Mo­vi­mien­to Re­vo­lu­ción Ciu­da­da­na, del ex­pre­si­den­te Ra­fael Co­rrea. A ni­vel lo­cal, esta or­ga­ni­za­ción po­lí­ti­ca al­can­zó 10 de 24 pre­fec­tu­ras (go­bier­nos pro­vin­cia­les), 61 de 240 al­cal­días (go­bier­nos mu­ni­ci­pa­les) y se po­si­cio­nó en con­tra del re­fe­rén­dum, sien­do esta op­ción la ga­na­do­ra en las 8 pre­gun­tas for­mu­la­das por el go­bierno del pre­si­den­te Gui­ller­mo Las­so.

En lo sim­bó­li­co, el “co­rreís­mo” al­can­zó una vic­to­ria que no lo lo­gró ni si­quie­ra cuan­do fue go­bierno: ob­tie­nen las pre­fec­tu­ras de las 4 pro­vin­cias con más po­bla­ción en el país (Pi­chin­cha, Azuay, Gua­yas y Ma­na­bí), re­gre­san al mu­ni­ci­pio de Qui­to lue­go de 10 años y le arre­ba­ta­ron el con­trol de la mu­ni­ci­pa­li­dad de Gua­ya­quil (el puer­to más im­por­tan­te del Ecua­dor) al Par­ti­do So­cial Cris­tiano, des­pués de 31 años de go­bierno lo­cal. A pe­sar de las acu­sa­cio­nes de co­rrup­ción, las sen­ten­cias y las pe­nas que cum­plen en pri­sión al­gu­nos de los ex­coi­dea­rios de Co­rrea, esta or­ga­ni­za­ción po­lí­ti­ca lle­gó a la se­gun­da vuel­ta pre­si­den­cial en 2021, es la pri­me­ra mi­no­ría del par­la­men­to y es la pri­me­ra fuer­za po­lí­ti­ca a ni­vel lo­cal. Re­cor­de­mos que el ex­pre­si­den­te vi­vió la cam­pa­ña elec­to­ral des­de Bél­gi­ca y la sen­ten­cia ju­di­cial en su con­tra le sus­pen­dió los de­re­chos po­lí­ti­cos por 25 años. No obs­tan­te, fue una fi­gu­ra gra­vi­tan­te para el éxi­to de sus can­di­da­tos.

Los re­sul­ta­dos tam­bién per­mi­ten afir­mar que, del lado del eje­cu­ti­vo, una de las ra­zo­nes más im­por­tan­tes de su de­rro­ta ha sido la au­sen­cia del Es­ta­do. En dos años de go­bierno, el Es­ta­do ecua­to­riano se ha mos­tra­do in­ca­paz de pro­veer ser­vi­cios pú­bli­cos ele­men­ta­les a la ciu­da­da­nía, lo que se ha tra­du­ci­do en pro­ble­mas de in­se­gu­ri­dad, fal­ta de ac­ce­so a me­di­ca­men­tos, abu­sos en las re­la­cio­nes la­bo­ra­les e in­fra­es­truc­tu­ra edu­ca­ti­va. La in­se­gu­ri­dad, por ejem­plo, ha de­ja­do cer­ca de 413 víc­ti­mas mor­ta­les en ma­sa­cres car­ce­la­rias y 4.603 fa­lle­ci­dos, pro­duc­to de muer­tes vio­len­tas en el año 2022. Para los ciu­da­da­nos, este es el pro­ble­ma más im­por­tan­te, y es evi­den­te que el Es­ta­do ha sido in­ca­paz de dar so­lu­cio­nes para esta si­tua­ción, sien­do el po­der eje­cu­ti­vo el más afec­ta­do, ya que en este re­cae la com­pe­ten­cia de iden­ti­fi­car, di­se­ñar, im­ple­men­tar y eva­luar las po­lí­ti­cas pú­bli­cas de se­gu­ri­dad.

La au­sen­cia del Es­ta­do tam­bién se ha re­fle­ja­do en la ba­jí­si­ma eje­cu­ción pre­su­pues­ta­ria. Se­gún la Fun­da­ción Ciu­da­da­nía y Desa­rro­llo, la ma­yor par­te de los mi­nis­te­rios al­can­zó el 30% de eje­cu­ción del pre­su­pues­to al pri­mer se­mes­tre del 2022. Esto mos­tró un de­bi­li­ta­mien­to de los ser­vi­cios pú­bli­cos, lo que a su vez ha in­ci­di­do en cómo los ciu­da­da­nos per­ci­ben al Es­ta­do. Pa­re­ce que el go­bierno na­cio­nal, ase­so­ra­do por li­ber­ta­rios a fa­vor de un Es­ta­do mí­ni­mo, no com­pren­dió que la reali­dad ecua­to­ria­na de­man­da un Es­ta­do pre­sen­te, que pro­vea de ser­vi­cios pú­bli­cos para los sec­to­res más po­bres, ya que un ecua­to­riano con in­gre­sos pro­me­dios (200 dó­la­res men­sua­les) ne­ce­si­ta de sa­lud, edu­ca­ción y se­gu­ri­dad pú­bli­cos, para al me­nos so­bre­vi­vir to­dos los días.

La de­fi­cien­te ges­tión gu­ber­na­men­tal, prin­ci­pal­men­te en el sec­tor so­cial, se re­fle­jó en sus ba­jos ín­di­ces de apro­ba­ción, que va­ria­ron en­tre 20% y 30%. En ese con­tex­to, el go­bierno de­ci­dió im­ple­men­tar un re­fe­rén­dum de 8 pre­gun­tas, en las cua­les prio­ri­zó la di­fu­sión de una de­ma­gó­gi­ca re­duc­ción de le­gis­la­do­res y la po­si­bi­li­dad de ex­tra­di­tar a ecua­to­ria­nos por de­li­tos tras­na­cio­na­les como el nar­co­trá­fi­co, tra­ta de per­so­nas, trá­fi­co de ar­mas, la­va­do de ac­ti­vos, en­tre otros. Como par­te de su es­tra­te­gia, el eje­cu­ti­vo hizo én­fa­sis en que la ex­tra­di­ción era ne­ce­sa­ria para ex­pul­sar a los de­lin­cuen­tes, pre­sen­tán­do­lo como una al­ter­na­ti­va a la cri­sis de in­se­gu­ri­dad, y que la re­duc­ción de apro­xi­ma­da­men­te 17 cu­ru­les ge­ne­ra­ría un “gran aho­rro” para el Es­ta­do.  Ni si­quie­ra la ba­jí­si­ma apro­ba­ción del Po­der Le­gis­la­ti­vo, (cer­cano al 8%) ayu­dó al eje­cu­ti­vo, y la op­ción del “No” ganó en to­das las pre­gun­tas de la con­sul­ta.

La lec­ción que la jor­na­da elec­to­ral deja al go­bierno del pre­si­den­te Las­so ha sido cla­ra: la de­mo­cra­cia fun­cio­na como pre­mio o cas­ti­go. Si se pro­veen de ser­vi­cios pú­bli­cos para los ciu­da­da­nos se pro­du­ce con­fian­za en las ins­ti­tu­cio­nes y la gen­te pue­de vo­tar por la con­ti­nui­dad de un go­bierno o por las re­for­mas que este plan­tea. Sin em­bar­go, si no hay ges­tión des­de las or­ga­ni­za­cio­nes es­ta­ta­les para pro­veer de lo esen­cial a la ciu­da­da­nía, el voto re­cha­zo será el re­sul­ta­do. No hay ma­yor cien­cia en esto: Da­vid Eas­ton ya lo dijo en la dé­ca­da de los 60 del si­glo an­te­rior, las ins­ti­tu­cio­nes del sis­te­ma po­lí­ti­co de­ben aten­der las de­man­das de la so­cie­dad para con­so­li­dar su le­gi­ti­mi­dad.

Si bien el resultado electoral debe analizarse según las particularidades que tiene cada provincia y ciudad del Ecuador, es evidente que el único ganador de la jornada es el Movimiento Revolución Ciudadana, del expresidente Rafael Correa.

Oja­lá el pre­si­den­te y su equi­po, por fin, re­di­rec­cio­nen el rum­bo de su ges­tión prin­ci­pal­men­te en el sec­tor so­cial. Esto, si por si aca­so quie­ren evi­tar más re­cha­zo po­pu­lar que pue­da desatar nue­va­men­te una ola de pro­tes­tas, o la con­so­li­da­ción de su an­tí­te­sis po­lí­ti­ca, el co­rreís­mo.

Pero esta elec­ción tam­bién deja al­gu­nas lec­cio­nes para el res­to de las or­ga­ni­za­cio­nes po­lí­ti­cas. El voto nulo ha sido sig­ni­fi­ca­ti­vo y es un sín­to­ma de des­gas­te del sis­te­ma po­lí­ti­co. Por ejem­plo, en la pro­vin­cia de Pi­chin­cha, esta op­ción al­can­zó el 17.98% de los vo­tos y su­peró al can­di­da­to que al­can­zó el ter­cer lu­gar (15.76% de los vo­tos vá­li­dos). Para la al­cal­día de Qui­to, en cam­bio, el voto nulo al­can­zó el 13,76%, su­peran­do a 8 can­di­da­tos a la al­cal­día. Para la al­cal­día de Gua­ya­quil el voto nulo al­can­zó el 10.68%, sien­do la cuar­ta op­ción en­tre los su­fra­gan­tes de este can­tón. La ma­si­va anu­la­ción del voto de­be­ría lla­mar la aten­ción a to­das las or­ga­ni­za­cio­nes po­lí­ti­cas del país, ya que más ade­lan­te po­dría tra­du­cir­se en un “Fue­ra To­dos”, algo que el Ecua­dor ya lo vi­vió en­tre el 2005 y 2006, y que está ac­tual­men­te pre­sen­te en Perú.

* Pro­fe­sor Uni­ver­si­ta­rio (Qui­to). Es­tu­dian­te de doc­to­ra­do en la Uni­ver­si­dad de Sa­la­man­ca (Es­pa­ña). Más­ter en Re­la­cio­nes In­ter­na­cio­na­les por el Ins­ti­tu­to de Al­tos Es­tu­dios Na­cio­na­les (Ecua­dor) y en Cien­cias Po­lí­ti­cas por la Univ. de Sa­la­man­ca.

Ima­gen de por­ta­da: pe­rió­di­co La Es­pe­ran­za

178 views

3 thoughts on “Elecciones seccionales en Ecuador: El regreso del correísmo y el rechazo a un Estado ausente

    Write a comment...

    Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *